19 de marzo de 2010

Pataleta

Neme pataleaba furioso siempre que le tocaba quedarse solo en casa. Era aburrido. La calle era ruidosa, (aún a medianoche las calles, siempre son ruidosas...) brillante, emocionante y había farolas y coches y escaparates y sangre. Sangre bombeada por corazones de adultos poco asustadizos, eso sí... pero sangre a fin de cuentas.
Además, esa semana estrenaban una peli de miedo en los cines y la gente era más propensa a gritar. A gritar. Y a asustarse.
Y mientras, ¡jopetas! a él le tocaba quedarse en casa... ¡Si es que no hay derecho, mamá! ¡Que no soy un bebé! ¡Tengo sed! ¡Estar solo en casa es aburrido y no, ¡jopetas!, no quiero leer un libro por enésima vez!
¡Tráeme al menos algo nuevo...!

1 comentario:

Anonymous dijo...

¡Jopetas!
¡Pero vaya por dios! ¿Aún nadie le a sugerido un libro nuevo a esa criatura?
Si es que desde que dejaron de poner puestos de libros en el mercado de los sábados... Tsk... Debería pedirle a alguna buena escritora que le escribiese algo que leer :P
kimu